¿Por qué los aviones reúnen muchas de las causas del ojo seco? Consejos para el cuidado de tus ojos durante vuelos de larga distancia
Sigue leyendo y descubre qué consejos debes seguir antes de volar en avión para evitar los factores que favorecen la sequedad de tus ojos.
¿Qué causas del ojo seco están presentes en los aviones?
Los viajes en avión reúnen varias de los factores externos que favorecen la aparición de los síntomas de la sequedad ocular. Estas son las causas del ojo seco más frecuentes en los aviones:
- Sequedad ambiental: las cabinas de los aviones utilizan circuitos de aire acondicionado de baja humedad para garantizar la presurización necesaria para la seguridad de los viajeros. Como consecuencia, el ambiente dentro del avión puede ser hasta un 30% más seco que en el exterior. El aire acondicionado y el ojo seco están muy relacionados, pues el ambiente reseco es uno de los factores que contribuyen a la aparición de sus síntomas.
- Cambio de temperatura: el mismo sistema de aire acondicionado de los aviones hace que la temperatura pueda ser muy diferente a la del exterior. Los cambios bruscos de temperatura también pueden afectar a la aparición de la sequedad ocular.
- Falta de sueño: nuestros ojos también necesitan descanso y la clase turista del avión no suele ser el lugar más cómodo para echarse una siesta. Cuando viajamos largas distancias en horarios que interfieren en nuestras horas habituales de sueño, es más probable que notemos síntomas de sequedad ocular.
- Iluminación artificial: la luz del interior de la cabina y las pantallas de móviles y ordenadores que entretienen nuestro viaje pueden ser perjudiciales para nuestros ojos.
Al estar expuestos durante varias horas a todos estos factores, es normal que durante un viaje en avión sintamos molestias en nuestros ojos: los ojos rojos, el picor, la irritación, la sensación de arenilla o la visión borrosa son algunos de los síntomas que pueden indicarnos que estamos sufriendo de sequedad ocular.
¿Cómo cuidar nuestros ojos durante un viaje en avión?
Con una buena preparación es posible prevenir eficazmente la sequedad ocular en un viaje. Cuando te prepares para viajar, ten en cuenta los siguientes consejos antes de volar en avión:
- Vuela de día: si es posible, programa tu viaje durante las horas en las que sueles estar despierto. Así estarás en sintonía con tu reloj biológico y evitarás que tus ojos estén cansados.
- Deja que tus ojos se echen la siesta: es difícil dormir en el avión, pero aunque no puedas conciliar el sueño, mantén tus ojos cerrados durante un tiempo. Así ayudarás a facilitar su hidratación.
- No estés mucho rato frente a pantallas: aunque el móvil, el ordenador o la pantalla del avión sean una gran tentación para atenuar el aburrimiento, la exposición a su luz puede acentuar la sequedad ocular.
- No te olvides de parpadear: si no te has resistido a ver un capítulo de tu serie favorita o has optado por leer un libro, ten en cuenta que tu frecuencia de parpadeo disminuye. Acuérdate de parpadear frecuentemente para ayudar a la lubricación de tus ojos.
- Mejor sin lentillas: aunque el ojo seco y las lentillas son compatibles, las lentes de contacto intensifican los síntomas de la sequedad ocular. Si vas a pasar un largo rato viajando, pásate a las gafas.
- Mantente alejado de la corriente del aire: el aire acondicionado y el ojo seco están muy relacionados. Evita que el foco de aire que tienes sobre la cabeza incida directamente sobre ti.
Con estos consejos para el cuidado de tus ojos será mucho menos probable que la sequedad ocular te afecte. Pero la preparación definitiva pasa por llevar un tratamiento en caso de que aparezcan los primeros síntomas del ojo seco. Si las condiciones de la cabina del avión superan todas tus precauciones, ten a mano lágrimas artificiales. Son el remedio más eficaz para aliviar los síntomas de los ojos secos y harán que, incluso si la sequedad ocular aparece, viajar sea un placer.